The God Who Loves Sinners (El Dios Que Ama A Los Pecadores)

But God demonstrates His own love for us in this: While we were still sinners, Christ died for us. -Romans 5:8

The other day I was praying for someone I know who doesn't believe in Jesus, who is actually rather antagonistic toward God. I've been praying for years, but I'm still waiting to see any change in them, any turning toward God. 

I know God longs for that person's salvation even more than I do. If I didn't believe that, I probably would have quit praying a long time ago. 

So as I was praying for them once again, I suddenly understood in a deeper way than ever before that God really does Love Sinners!

He loves the ones who hate Him, who reject Him, who mock Him. 

He loves your annoying neighbor, your difficult relative, and the person who cuts you off on the freeway. 

He loves those who think they don't need Him, who are angry at Him, or who deny He even exists.

God loves sinners, not because of anything in us, but because of who He is!

I believed in Jesus at the age of five, so I've always known God loved me. I can't even remember what it was like to not know God. Perhaps that's why this was such a revelation for me.

Not only does God love those who are seeking Him and who truly want to know Him, He loves every person on this planet! Some of us are "redeemed" sinners, others are hopelessly lost sinners, but we are all loved deeply by an awesome God.

That's why we continue to pray for and love others - because we are blessed to know the God who loves sinners.

El Dios Que Ama A Los Pecadores

Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros. -Ro. 5:8

El otro día estaba orando por alguien a quien conozco y quien no cree en Jesús y, en realidad es más bien antagonista hacia Dios. He estado orando por años, pero todavía estoy esperando para ver cambios en él, algún giro hacia Dios.

Sé que Dios anhela la salvación de esa persona aún más que yo. Si no lo creyera, posiblemente habría dejado de orar hace mucho tiempo.

Entonces, mientras oraba por él una vez más, de repente me di cuenta, de una manera mucho más profunda que nunca antes, que Dios ¡verdaderamente Ama A Los Pecadores!

Ama a los que lo odian, los que lo rechazan, los que se burlan de Él.

Él ama a tu molesto vecino, tu pariente difícil y la persona que te cierra en la autopista.

Él ama a aquellos que piensan que no lo necesitan, los que están furiosos con Él o que niegan que Él siquiera exista.

Dios ama a los pecadores, no por algo en nosotros sino por ¡Quien Él es!

Yo creí en Jesús a los cinco años, así que siempre he sabido que Dios me ama. Ni siquiera puedo recordar como es el no conocerlo. Quizá es por eso que fue una revelación tan grande para mí.

Dios no solamente ama a aquellos que lo están buscando y que verdaderamente quieren conocerlo, ¡Él ama a cada persona sobre este planeta!

Algunos de nosotros somos pecadores “redimidos”, otros son pecadores perdidos sin esperanza, pero todos somos profundamente amados por un Dios maravilloso.

Es por eso que continuamos orando por otros y amándolos – porque somos bendecidos al conocer al Dios que ama a los pecadores.