On my recent trip to ID, I was flying at about 37,000 feet. Beneath the plane was a bank of clouds that looked like a huge flock of sheep spread out, lazily resting in the sunshine.
With such peaceful surroundings, a funny question occurred to me. Is it easier to hear God's voice at 37,000 feet above the earth?
I imagine some people might think so. If God lives in heaven, then the closer to heaven, the closer to God, right? :)
Thankfully, while God does live in heaven, He also dwells with us.
When Jesus came to earth, it was as "Emmanuel" - God with us. Jesus came so we could experience God not from a distance but near and ever present.
Not only is God with us, but I believe He is also speaking.
Sometimes it may feel like He's silent. But I think perhaps that is so we will learn to listen to Him in new ways.
God continually speaks through creation, through His Word the Bible, through other people, through circumstances, through His Holy Spirit in a still small voice....
God wants us to hear His voice. He wants to have an ongoing conversation with us. I think it delights His heart when we ask Him to teach us how to listen to Him.
We won't always hear Him perfectly.
We may not always like what we hear.
We may not always obey what we hear.
But the more we learn to listen, the more we'll experience the reality of His presence with us always.
And the more I've learned to listen, the more I've come to delight in my God.
It doesn't really matter where we are, on earth or flying above the clouds. God is with us, and He can teach us how to listen to His voice more and more.
"I am the good shepherd...My sheep listen to my voice; I know them and they follow me." -Jesus
(from John 10:11, 27)
Aprendiendo a escuchar
En mi reciente viaje a Idaho estaba volando a más de 112.000 metros de altura. Debajo del avión había un banco de nubes que parecían un enorme rebaño de ovejas esparcidas, descansando perezosamente bajo el sol.
Con alrededores tan pacíficos se me ocurrió una pregunta chistosa. ¿Es más fácil escuchar la voz de Dios a 112 mil metros arriba de la tierra?
Imagino que algunas personas pueden pensar que sí. Si Dios vive en el cielo, entonces lo más cerca que esté del cielo, lo más cerca que se estará de Dios, ¿cierto? :)
Gracias a Dios, aunque Él vive en el cielo, también habita en nosotros.
Cuando Jesús vino a la tierra, fue como “Emanuel” –Dios con nosotros. Jesús vino para que pudiéramos tener a Dios, no desde lejos, sino cerca y siempre presente.
Dios no sólo está con nosotros, sino que creo que también está hablando.
A veces puede parecer que está en silencio. Pero creo que quizá sea para que aprendamos a escucharlo de nuevas maneras.
Dios habla constantemente a través de la creación, de Su Palabra la Biblia, a través de otras personas, de las circunstancias, de Su Espíritu Santo en una vocecita…
Dios quiere que escuchemos Su voz. Quiere tener una conversación continua con nosotros. Creo que deleita Su corazón cuando le pedimos que nos enseñe cómo escucharlo.
No siempre le escucharemos perfectamente.
Puede que no siempre nos guste lo que escuchamos.
Puede que no siempre obedezcamos lo que escuchamos.
Pero mientras más aprendamos a escuchar, más experimentaremos la realidad de Su presencia con nosotros siempre.
Y entre más he aprendido a escuchar, más he llegado a deleitarme en mi Dios.
En realidad no importa dónde estamos, en tierra o volando por encima de las nubes. Dios está con nosotros y Él puede enseñarnos como escuchar Su voz más y más.
"Yo soy el buen pastor. . .Mis ovejas oyen mi voz; yo las conozco y ellas me siguen.”
-Jesús (de Jn. 10:11, 27)
1 comment:
This is so spot on. One of my favorite posts. God is truly always speaking to us. We allow our feelings, physical and emotional to tell us that He is not there, but He does not change. If we can always remember, even in the chaos, that He is right there, walking with us, and He is speaking. He is telling us to trust Him. He is saying" I Am here." He is saying "Do not be afraid n I have overcome the world".
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